La miseria y las epidemias no pueden con la fuerza y los sueños de Pedro, un niño de la calle, cuya desbordante imaginación y enorme tenacidad le permiten sobrevivir intentando forjarse un futuro halagüeño. En un escenario de máxima pobreza, de revoluciones obreras a la vez que de desarrollo industrial, pasa su vida en comprometida relación con personajes de las más diversas clases sociales.
En medio de la vorágine, se ve obligado a huir, sobrepasado por los acontecimientos que le impone un destino inoportuno, a la isla de Cuba, sumida en una guerra de causas complejas. El viaje de ida y vuelta le permitirá vivir un mundo mágico, contrapunto de la adversa realidad, en el que va siendo introducido por Marina, una niña omnipresente de fascinantes poderes, y que se ve implementado por la santería y la magia negra practicadas en la isla.
La llegada a Málaga le permite retomar sus orígenes, recuperar todo aquello a lo que se había visto obligado a renunciar y ajustar su mente, estragada por un cúmulo de intensas experiencias que han puesto en peligro su salud.